Un auto va en contramano.
Conductor: Descontrolado,
porque hoy se ha dado cuenta
que perdió el bien más preciado.
Esquivando a otros coches,
acelera sin cuidado.
Pensar en su propia vida,
hace rato ya ha dejado.
Poco a poco va llegando
a su propio escenario:
de feliz no tendrá nada,
eso es muerte asegurada.
De repente, más no tanto,
un vehículo aparece:
Él lo embiste fuertemente,
sin meditarlo dos veces.
Ya se encuentra envuelto en llamas,
pero ya no se estremece:
pues entre sus manos tiene
la foto de la que quiere.
Otra alma más en pena,
que tristemente perece.
Cuando la parca lo encuentre
su cuerpo yacerá inerte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario