miércoles, 27 de febrero de 2013

Deshaogo: antítesis.

Hemos compartido tiempo
no muy largo, ni perverso.
Yo no sé que significa
ni si es más que un par de versos.

Leer tus frases me genera
escribir mucho más que esto.
Pero mi mano no puede
siempre expresar lo que siento.

Definitivamente eres
mi gran musa inspiradora:
Solamente tu sonrisa
logra que escriba mil veces.

Mientras contigo intercambio
palabra en forma de beso.
Con ella era mucho menos:
gritarnos hasta lo eterno.

Hablar contigo provoca,
beberé mas de tu néctar
que de tus labios emana
cada vez que yo te beso.

Desahogo: Epílogo

Un auto va en contramano.
Conductor: Descontrolado,
porque hoy se ha dado cuenta
que perdió el bien más preciado.

Esquivando a otros coches,
acelera sin cuidado.
Pensar en su propia vida,
hace rato ya ha dejado.

Poco a poco va llegando
a su propio escenario:
de feliz no tendrá nada,
eso es muerte asegurada.

De repente, más no tanto,
un vehículo aparece:
Él lo embiste fuertemente,
sin meditarlo dos veces.

Ya se encuentra envuelto en llamas,
pero ya no se estremece:
pues entre sus manos tiene
la foto de la que quiere.

Otra alma más en pena,
que tristemente perece.
Cuando la parca lo encuentre
su cuerpo yacerá inerte.

Desahogo: Capítulo II

Por favor explica amigo,
esto que me ha sucedido.
Yo pensé que esa mujer
era todo lo que ha sido.

Mas me han dicho, he entendido,
que todo estaba perdido.
Pero yo no he comprendido
qué golpe bajo he sufrido.

Yo he intentado muchas veces
enmendar lo ya vivido.
Cicatrices no perecen,
dentro mío han crecido.

Y por más que medicina
los doctores me hayan dado.
Conozco la abierta herida
que por siempre me hará daño.

Aún así, yo te agradezco
por habérmelo avisado.
Toda rosa tiene espinas,
varias veces lo han cantado.

Desahogo: Capítulo I

Cada día que atravieso
es un golpe muy constante.
Lo que yo por tí sentía,
no me lo quitará nadie.

¿Por qué al fin y al cabo odiamos
aquello que precisamos?
Lo nuestro era muy hermoso,
me lastima que rompamos.

Sin embargo te comento,
aunque poco te interese,
que yo mucho te quería
y mi amor subía con creces.

¿Nos debemos una charla?
¿O es que a ti no te convence?
Todo lo que hemos vivido,
tu recuerdo ni merece.

Desahogo: Prólogo

Ya que estamos separados
puedo decir sin cansancio,
que no fueron muchas veces
las que tú me has escuchado.

Yo te vivía repitiendo
que escucharas lo que pienso,
ya que todos lo sabían:
no te importo, ni qué siento.

Así que lo sucedido,
de por sí inevitable,
no era más que un recorrido:
dividir lo inseparable.

Por ahora el encontrarnos,
el dolor, ya insoportable.
Y aunque estemos más tranquilos,
es el experimentable.

Y en el colectivo pienso
el daño que hemos causado,
sobre todo a nuestra hija:
ella sufrió todo en vano.

martes, 26 de febrero de 2013

Maquinando

Ahora hablamos más seguido
diría, muy frecuentemente.
Hasta incluso extrañamos
reír de forma permanente.

Si no muestras una imagen
me describes verbalmente
cómo vas a trabajar,
vestida indecentemente.

Sin embargo no interesa
lo que diga ya la gente.
El "qué dirán", nada pesa
al besarte eternamente.

De seguro tu generas
mucho sentimentalmente:
torbellino de pasiones,
me confunde diariamente.

Mi corazón ya no entiende
cuando un no es rotundamente
lo que la cabeza niega
de manera displaciente.

¿Seguirá siendo un misterio
dónde estamos actualmente?
Si esto no es más que un camino
que surgió naturalmente.

lunes, 25 de febrero de 2013

Amanecer

Se conocen hace tiempo,
ya no se ven tan seguido.
Sin embargo, el otro día,
juntos se morían de risa.

Se contaron mucahs cosas,
del presente y del pasado.
También planes a futuro
que cada uno ya tenía.

Él se sentía muy a gusto
en presencia femenina,
mientras ambos no entendían
en que se convertiría.

Compartieron una cena
y alguna que otra caricia,
mas cuando se dieron cuenta,
en la cama se amarían.

Besos, uno atrás del otro,
por siempre ellos se darían.
Pero vieron la hora que era
y empezó la gran corrida.

Quién sabe si esto algún día
se llegara a repetir.
Tal vez sí, tal vez serían
amigos y nada más.

Nota: la poesía es de mi autoría, pero el título fue consultado y posteriormente aprobado por  la mujer que me inspiró a escribirla. Me gustaría dejarla en el anonimato y que únicamente nosotros sepamos quién es ella para darle un ínfimo toque de misterio al texto arriba expresado.

La desconocida y el tren nocturno

Buenas noches señorita
¿Mi nombre? Iván.
Estoy solo, una hija,
me hace falta compañía.

No le prometo un castillo,
ni un diamante o joyería.
Todo lo daría de mí,
por robarle una sonrisa.

Si tan solo usted supiera
lo preciosa que está usted,
con ese cabello negro
y sus ojos de café.

El atuendo bien le cuadra
con su cara angelical,
y esa mente pensativa,
cuestionando la verdad.

Ojalá doctora pueda
curar este enfermedad:
un caso de mal de amores;
terapia intensiva o más.

Deje que el tren la transforme
en una mujer salvaje:
la luna será su luz;
la pasión, dulce brebaje.

Esta poesía se la escribí a una chica que subió a uno de los últimos trenes Glew - Constitución de ayer, Domingo 24 de Febrero de 2013. LLevaba el pelo largo, suelto, y tenía ojos marrones con sombra celeste que le hacían juego con el ambo que llevaba puesto.
Tenía pensado entregársela, pensando ingenuamente que se iba a bajar en Constitución. Sin embargo, cuando estaba por terminar de transcribirla, veo que a eso de las 23:15 se baja en Lanús lo cuál me dejó con una copia del poema en vano en el cuaderno. Si algún día la encuentro nuevamente, tengo pensado arrancar la hoja y dársela.

sábado, 23 de febrero de 2013

Te deseo / quiero

Quiero llamarte, invitarte a salir,
oír tu voz y hacerte reír.
Quiero ver tus ojos verdes,
claros como el agua que ves.

Quiero sentir tus labios,
dulces como la miel.
Quiero con con ellos me atravieses,
cálidos cual fogosa pasión.

Quiero sentir tus suaves manos
como el mismísimo algodón.
Quiero besar tu cuerpo
y que tiembles de emoción.

Quiero decirte lo mucho que significas,
lo mucho que me haces falta.
La felicidad que en mí generas
que me hace sobrevivir.

Quiero llamarte, invitarte a salir,
oír tu voz y hacerte reír.
Quiero que nos bañemos juntos
y que nuestros tibios cuerpos
juntos ardan... de pasión.

Poesía iniciada después de primavera en el 2012, terminada el 23 de Noviembre del mismo año.

Regrets / Breaking up

Hay días en los que me arrepiento
de que nos hayamos separado
¿Por qué nos tratamos tan mal?
¿Hubo un tiempo en que nos amamos?

Hay días en los que pienso
en no verte más la cara.
Sin embargo son varias las noches
en las que me duermo llorando.

Hay días en los que quisiera
salir corriendo a buscarte,
pedirte perdón de rodillas rogando
que los tres nos mudemos al campo.

Hay días en los que despierto sueño
en un mundo sin peleas ni llanto.
Esto para mí tampoco es fácil,
poco a poco lo iré pagando.

He fallado

Trato de pensar en otra
cuando veo de la mano
tanta gente que se quiere
mientras vos y yo peleamos.

Me imagino junto a alguien
que sin rostro ni figura
me desea y me respeta
por quién soy y no qué tenga.

Ya volviendo siento frío
porque afuera está nevando,
al igual que dentro mío:
tengo el corazón helado.

Desearía que esto fuera
más fácil que ir a Idilia.
Mas me pesa que esto sea
pesadilla en vigilia.

Ya no hay amor dentro mío

Miro por la ventana,
el amor en todas partes
¿Cómo podré levantarme?
La soledad me está matando.

Unas veces lloro en vano,
varias lágrimas derramo
otras cuantas bronca siento
por lo que hemos derrochado

Pero otras el momento
lleva a preguntarme tanto
¿Por qué juntos no cuadramos
si alguna vez nos amamos?

Short, but not sweet at all

Salgo cansado de trabajar
pensando en el viaje que me espera.
Subo al colectivo sin evitar
ver varias parejas de fiesta.
Me pongo a imaginar
¿qué sería de nosotros,
si juntos fuera otra cosa?
A veces con alegría,
pero otras con mucha pena
porque esto no es la vida
es una eterna condena.

Contra viento y marea

Ahora que estoy triste y solo
me doy cuenta de lo que hemos pasado
Atravesamos lo bueno y lo malo,
hasta el día de hoy no sé cómo.

Hubo peleas, gritos, también llanto
nuestra hija a veces mirándonos.
Debería habernos visto besándonos,
para ella fuimos un espanto.

Yo sé que no es nada fácil
poner todo, contra viento y marea.
Subirse a un barco que da muchas vueltas,
pensando sólo con un par de manos.

Yo sé que cuando nos enojamos
ponemos caras y muecas de odio.
Este amor no es una competencia,
no tenemos que subirnos al podio.

Ahora que estoy triste y solo
me doy cuenta como nos hemos tratado.
El amor es la más bella recta
en la carrera que la vida..
nos ha dado.